
Evaluation and Treatment of Knee Pain: A Review
Investigadores: Vicky Duong, Win Min Oo, Changhai Ding, Adam G. Culvenor, David J. Hunter
Año publicación: 2023
Medio: JAMA
La osteoartritis es el trastorno articular crónico más común a nivel mundial y la forma principal de artritis entre los adultos mayores, siendo la rodilla la articulación más frecuentemente afectada. Se conceptualiza como el fallo estructural y funcional de las articulaciones sinoviales. Implica un compromiso progresivo del cartílago, hueso adyacente, revestimiento sinovial y músculo periarticular. La OA de rodilla generalmente se presenta con dolor articular que se exacerba con el uso y se alivia con el reposo. Un síntoma característico es la rigidez matutina breve y autolimitada (menos de 30 minutos), junto con la ausencia de síntomas constitucionales. El dolor suele ser de inicio insidioso en la edad media o tardía. El diagnóstico de OA de rodilla puede establecerse clínicamente en pacientes de 45 años o más que presentan dolor articular relacionado con la actividad y rigidez matutina nula o breve. En el examen físico, los signos cardinales incluyen crepitación (una cualidad de rechinamiento audible o palpable) al flexionar y extender la rodilla, así como agrandamiento óseo y sensibilidad en la línea articular. Aunque la radiografía simple no es obligatoria para el diagnóstico, se utiliza con frecuencia y puede proporcionar apoyo diagnóstico al mostrar estrechamiento del espacio articular y formación de osteofitos (espolones). La resonancia magnética (RMN) rara vez está indicada, a menos que se sospeche un trastorno interno de la rodilla (como bloqueo o inestabilidad) o una osteonecrosis temprana. El factor de riesgo no modificable más importante es la edad, ya que la incidencia y prevalencia aumentan con cada década de avance en la edad adulta. La prevalencia también es casi el doble en mujeres que en hombres. Los factores de riesgo modificables más importantes son el sobrepeso y la obesidad. Otros factores incluyen la lesión articular previa (como un desgarro del ligamento cruzado anterior o meniscal), la debilidad del músculo cuádriceps y la desalineación de la rodilla. El objetivo principal del tratamiento es aliviar el dolor y mejorar la capacidad funcional. Los enfoques terapéuticos se dividen en no farmacológicos, farmacológicos y quirúrgicos, siendo el ejercicio físico un componente fundamental.