Estudio que analiza el impacto global de reducir, para la enfermedad cardiovascular, cinco factores de riesgo principales como son una presión arterial sistólica de 130 mmHg o más, un nivel de colesterol HDL de 130 mg por decilitro (3,36 mmol por litro) o más, un índice de masa corporal (IMC) de menos de 20 o 25 o más, diabetes y tabaquismo. La ausencia de cinco factores de riesgo clásicos a los 50 años se asoció con una esperanza de vida más de una década mayor que la presencia de los cinco factores de riesgo, en ambos sexos. Las personas que modificaron su hipertensión y tabaquismo en la mediana edad tuvieron la mayor cantidad de años de vida adicionales sin enfermedad cardiovascular y muerte por cualquier causa, respectivamente.