El sistema nervioso central (SNC) detecta e integra el estado de la glucosa en sangre, regulando sus niveles a través de la comunicación con los órganos periféricos. Si bien el conocimiento tradicional sostiene que el hipotálamo controla principalmente la homeostasis de la glucosa, el tronco encefálico, aunque menos estudiado, ha surgido como un actor clave en el metabolismo de la glucosa en sangre. Esta revisión narrativa explora la cuestión.