The brain–body energy conservation model of aging
Investigadores: Evan D Shaulson, Alan A Cohen, Martin Picard
Año publicación: 2024
Medio: Nature Aging
Etiquetas: cerebro, envejecimiento/senescencia, metabolismo
Categorías: Biología, Fisiología
El envejecimiento implica cambios aparentemente paradójicos en el metabolismo energético. La acumulación de daño molecular aumenta el gasto energético celular, pero el gasto energético de todo el cuerpo se mantiene estable o disminuye con la edad. Resolvemos esta aparente contradicción posicionando al cerebro como mediador y agente en la economía energética del organismo. A medida que los tejidos somáticos acumulan daño con el tiempo, se activan costosas respuestas de estrés intracelular, lo que hace que las células envejecidas o senescentes secreten citocinas que transmiten una mayor demanda de energía celular (hipermetabolismo) al cerebro. Para conservar energía ante un presupuesto energético cada vez menor, el cerebro despliega respuestas de conservación de energía, que suprimen los procesos de baja prioridad, lo que produce fatiga, inactividad física, disminución de las capacidades sensoriales, alteraciones inmunológicas y "déficits" endocrinos. Llamamos a esta cascada el modelo de conservación de energía cerebro-cuerpo (BEC) del envejecimiento. El BEC describe (1) el costo energético del envejecimiento celular, (2) cómo la percepción cerebral del hipermetabolismo asociado a la senescencia puede impulsar las manifestaciones fenotípicas del envejecimiento y (3) los principios energéticos subyacentes a la modificabilidad de las trayectorias del envejecimiento por factores estresantes e intervenciones de gerociencia.