La formación de nuevos vasos sanguíneos, conocida como angiogénesis, es esencial para el crecimiento y la propagación de tumores sólidos. Esta se ve favorecida por las condiciones hipóxicas que se desarrollan en los tumores en crecimiento e impulsa la expresión de factores de crecimiento proangiogénicos por parte de las células tumorales y diversas células del estroma. Sin embargo, la vasculatura asociada al tumor (VAT) generada por la angiogénesis es anormal y constituye una barrera clave para la entrada de linfocitos T en los tumores. Además, la VAT crea un microambiente hostil debido a la acumulación de células inmunitarias supresoras, las condiciones hipóxicas y ácidas, y la alta presión intersticial, que limitan la función y la supervivencia de los linfocitos T efectores. En este trabajo, presentamos los mecanismos de migración de linfocitos T a los tumores, incluyendo la vía de las vénulas endoteliales altas, y la importancia de las estructuras linfoides terciarias, que funcionan como sitios privilegiados para la presentación de antígenos, la activación y la coestimulación de los linfocitos T, para el desarrollo de una inmunidad antitumoral eficaz.