La homeostasis metabólica, esencial para el equilibrio energético, está regulada por una red altamente integrada que involucra los sistemas nervioso, endocrino e inmunitario. Si bien los modelos tradicionales enfatizaban los mecanismos de retroalimentación endocrina y el control del sistema nervioso autónomo, la evidencia reciente revela una amplia interacción entre estos sistemas, formando una red neuroendocrino-inmunitaria dinámica. El cerebro coordina el equilibrio energético integrando señales de los órganos periféricos, regulando el apetito, la tasa metabólica y la utilización de nutrientes. Las respuestas inmunitarias, particularmente en la obesidad, contribuyen a la disfunción metabólica a través de la inflamación crónica y las cascadas de citocinas. Esta revisión sintetiza los mecanismos celulares y moleculares subyacentes a las interacciones neuroendocrino-inmunitarias que mantienen la homeostasis de la glucosa y la energía.